Podemos comenzar nuestra ruta contemporánea por el MACBA o el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, en pleno Raval e inaugurado en 1995 es uno de los muchos edificios barceloneses que goza de renombre internacional. Causa de ello es su arquitecto, Richard Meier.
Pero este es uno de los muchos edificios de talla internacional, en Barcelona podemos encontrar también edificios destacables y polémicos como la Torre Agbar, de Jean Nouvel; la Torre de Collserola, del mismísimo Norman Foster; el Auditori de Rafael Moreno; el puente de Bac de Roda del famoso Santiago Calatrava o el TNC de Ricard Bofill.
Otra obra impresionante es el mercado de Santa Caterina del genial arquitecto Enric Miralles, o el Edificio de Gas natural que con sus agitados volúmenes en vilo expresan la confusión cambiante de los tiempos, elevándose en el perfil de la capital catalana como un hito ciudadano, un emblema de vanguardia artística y un signo de poder económico.
Y no sólo edificios, sino que la tendencia de la arquitectura contemporánea se extiende también a muchos parques de Barcelona. Podremos encontrar ejemplo de ello en el Parque de la Estació del Nord, en el Parque de la España Industrial o en el Parque de Joan Miró, como no podía ser de otra forma, presidido por una monumental escultura del artista catalán.
En cuanto a los barrios, hay en Barcelona distritos enteros que se vinculan a una arquitectura postmoderna, a saber, la Villa Olímpica (nacida del antiguo suelo industrial del Poblenou justo delante del Mar), en el Anillo Olímpico de Montjuic (con el Palau Sant Jordi a la cabeza, obra del japonés Arata Isozaki) y el Jardín Botánico de Barcelona, jardín que se extiende por la ladera de la montaña de Montjuic como una malla de terrazas totalmente accesibles.
Así pues, Barcelona nos puede deparar muchos atractivos si lo que nos gusta es la arquitectura contemporánea, arquitectura que edificio tras edificio se hace en torno a una gran polémica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario