En esa línea, diversas ciudades de todo el mundo piensan en la construcción de ecotorres y planean nuevos rascacielos con materiales reciclados, energías renovables o cubiertas vegetales.
Te contamos cuáles son los más espectaculares: La Torre Hearst: es el rascacielos más ecológico de Nueva York, por el momento. Sus estrategias sostenibles, como los sistemas de eficiencia energética o materiales reciclados en más del 90% la han hecho merecedora del premio internacional Highrise o del certificado LEED de oro.
También en NY, se proyecta el One Bryant Park, que se convertirá en el primer rascacielos de la ciudad cuya tecnología y desarrollo se basen totalmente en las nuevas técnicas ecológicas. ¡Todo un ejemplo de arquitectura sostenible! La Torre del Banco de América: situada en Manhattan, incluye los elementos arquitectónicos “verdes” de la Torre Hearst, además de otros tan curiosos como un sistema de ventilación natural y luces LED sensibles a la luz solar.
Otro buen ejemplo es la Torre CIS en Manchester, que cuenta con unos 7.000 paneles solares en la fachada y 24 turbinas eólicas en el tejado… ¡súper eco!
En Rotterdam, Holanda, se está construyendo el Urban Cactus, un grupo de 98 unidades residenciales cuyos balcones curvados permiten aprovechar mejor el sol y colocar más elementos vegetales. ¡Arquitectura sostenible y original!
Las grandes construcciones no deberían estar reñidas con el respeto al medio ambiente. Puede que en un futuro todos vivamos en rascacielos y por ello se ha de trabajar para que contaminen lo menos posible. Y tú, ¿qué opinas de estas gigantescas construcciones? ¿Te gustaría vivir en un rascacielos?
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